García Martínez: "Ruedas de prensa o de pavos"

García Martínez es uno de los veteranos periodistas que trabajan en la Región de Murcia. Este jueves escribió este glorioso artículo de opinión en las páginas del diario La Verdad de Murcia:

"Las ruedas de prensa de los políticos (y también las de algunos otros) son casi siempre mera propaganda a su favor. Ellos nos la meten a los periodistas y nosotros -aunque sin maldad- se la metemos a los lectores. Se mire por donde se mire, una putada muy considerable, para qué nos vamos a engañar. Hasta el punto de que ya no sabemos si llamarlas ruedas de prensa o ruedas de pavo real.

Pero últimamente la estafa alcanza todavía mayores proporciones. El político, que lo quiere todo, tiene la desfachatez de convocar a los informadores, pero advierte que no consentirá que se le pregunte. Hasta ahí son capaces de llegar, señora mía. «Vengan ustedes para acá -incluso si les resulta casi imposible aparcar-, que les voy a hacer que pierdan el tiempo». Y se quedan tan panchos. Me digo: ¿Para qué quiero yo, ni nadie, que un mandanga de estos me lea allí unas cuartillas, y me mande al periódico para que se las publiquemos? ¿Quiénes se han creído que son estos tíos, cuando hasta el Rey permite que se le interrogue?

Hay que ser belorcio para exigir a los periodistas que no le pregunten sobre asuntos que interesan al común. Belorcios y desvergonzados. Y lo hacen ya todos, incluyendo a los que se tiene por más puros, como el Puigcercós de la izquierda catalana. (Puros los que se fuman ellos a nuestra costa). Pero toda la culpa no es de estos, sino los periodistas -o los jefes de los periodistas- que, por lo que sea, se arrugan y no tienen lo que hay que tener para mandar a esta caterva de golfos a tomar por saco.

Encima de que el dador de la rueda te puede contestar eso tan cursi de no coment y te la tienes que envainar, quieren ahora que ni siquiera abras la boca. Pues, joder, que manden una nota escrita a las redacciones, y ya veremos si lo que envían tiene algún interés. ¡Ay, los medios, los medios! ¡Qué bajo hemos caído! ¡Qué mal tiene que andar el periodismo pseudo-democrático, para que se consientan estas actuaciones tan dictatoriales y denigrantes!"